3,2,1... ESTE SOY YO

20N EN TIERRAS ALTAS

Mi familia, que en el año 1975 vivía en un pequeño pueblo de la comarca de Tierras Altas me contó, que para ellos, el día de la muerte de Franco (un día tal como hoy hace 41 años) no fue nada especial (excepto para mi madre que recibió una semana de vacaciones en el colegio). Mis abuelos estaban realizando la matanza del cerdo para almacenar provisiones como todos los años por esas fechas cuando, en la televisión de una de las vecinas vieron la noticia en la única cadena que en ese momento se podía disfrutar en el pueblo y escucharon esas palabras de Carlos Arias Navarro que han quedado grabadas en la mente de todos: "Españoles... Franco ha muerto". 

Para ellos este momento, supuso el fin de las opresiones que recibían por parte de las autoridades religiosas y civiles que pese a haberse reducido en los últimos años de la dictadura seguían presentes y les impedían trabajar en el campo y expresarse con libertad. 

Carlos Arias Navarro anunciando la muerte de Franco

LAS PINTURAS RUPESTRES EN ESPAÑA

Cuadro resumen con las diferencias principales entre la pintura cantábrica y la levantina.

TEATRO ROMANO DE MÉRIDA

     Si existe una obra en el territorio hispano que de verdad refleje la pervivencia cultural del legado romano, esa es el teatro Romano de la ciudad de Mérida (Augusta Emerita en tiempos de los romanos), dado que a día de hoy, sigue desempeñando la misma función que cuando fue construida en los años 16 ó 15 a.C., la de albergar representaciones teatrales.

     El teatro, seguía las normas de construcción de Marco Vitruvio, respondiendo al modelo estándar para estos edificios. Como ya se ha comentado anteriormente fue construido en el 16 ó 15 a.C. (se sabe por las inscripciones encontradas sobre las puertas de acceso a la orchestra). Sin embargo, sufrió varias remodelaciones, en el 105 se levantó el actual frente de escena y en entre el 333 y el 335 se volvió a reformar junto con la vía que rodea el edificio. Por estas fechas (en torno al siglo IV) se dejó en desuso debido a la introducción del cristianismo que consideraba inmorales las obras teatrales.

     Además, esta obra destaca por el uso de las matemáticas y de los conocimientos de ingeniería de los que disponían los romanos (que nada tienen que envidiar a los actuales). En primer lugar, el aprovechamiento de la pendiente del cerro San Albín para la construcción escalonada de las gradas y en segundo lugar, la colocación estratégica de las distintas piedras para lograr una gran acústica.

    Como conclusión podremos decir que el teatro de Mérida es una gran obra ingenieril que ha permitido mantener el legado cultural romano en el territorio español.